La marca de belleza Catrice presentó un nuevo análisis paneuropeo que ofrece una perspectiva fresca sobre la evolución de la moda, el bienestar y el consumo de belleza en Europa. El estudio, basado en datos de 30 ciudades europeas y 20 británicas, midió factores como la densidad de spas, salones de belleza, frecuencia de eventos, búsqueda de actividades de bienestar y presencia en redes sociales.
Londres emerge como la capital definitiva del estilo europeo, gracias a su vasta oferta comercial, su profunda conexión cultural y su liderazgo digital.
Londres: Escala, sofisticación y bienestar
Con más de 2.000 ubicaciones de compras, 4.559 salones de belleza, 857 spas y alrededor de 484.000 búsquedas anuales relacionadas con yoga y pilates, Londres lidera el ranking de manera contundente. Además, alberga más de 4.200 eventos de moda y belleza anualmente y acumula más de cinco millones de hashtags vinculados al estilo y la moda en Instagram.
Este desempeño evidencia una transformación en el consumo: la belleza ya no se limita a productos, sino que abraza un estilo de vida integral donde bienestar, moda y retail experiencial convergen.
Zúrich y París: Precisión suiza y herencia francesa
En segundo lugar, Zúrich destaca con una propuesta de lujo consciente. A pesar de su tamaño, su densidad de spas y salones de belleza per cápita es sobresaliente, reflejando su enfoque en la calidad y el bienestar premium. La ciudad suiza se afianza como un destino de estilo de vida refinado y saludable.
París, por su parte, continúa siendo un faro global de belleza y moda. Con más de 2.000 tiendas, 1.800 salones y una vibrante escena de eventos, la capital francesa combina su herencia icónica con una fuerte presencia digital, sumando más de 2,5 millones de hashtags relacionados en Instagram.
Tendencias emergentes en Europa
En el Reino Unido, Manchester se posiciona como el segundo polo de glamour, mientras que Edimburgo y Dublín destacan por su creciente interés en el bienestar, con un fuerte impulso en las búsquedas de yoga y pilates.
En el continente, ciudades como Ámsterdam, Barcelona y Milán consolidan su influencia combinando experiencias de retail de estilo de vida con una propuesta de bienestar integrada. Milán, en particular, refleja una transición hacia un lujo más holístico, que une estética y salud.
Implicaciones estratégicas para el retail
El análisis de Catrice ofrece un mensaje claro para minoristas e inversores: el futuro del consumo de belleza y moda está intrínsecamente ligado al bienestar. Las ciudades que logren equilibrar densidad de servicios, influencia cultural y resonancia digital dominarán el escenario europeo.
Los nuevos formatos como eventos híbridos, pop-ups de lujo dirigidos por influencers y espacios comerciales multisensoriales marcarán la pauta en los próximos años, particularmente en las ciudades líderes.
Londres, Zúrich y París encabezan esta transformación, definiendo un nuevo glamour urbano en el que el consumo se convierte en una experiencia de bienestar, identidad y estilo de vida.
