En un año donde el animal print y los looks maximalistas dominan tanto las alfombras rojas como el street style, Kaia Gerber decidió marcar la diferencia. La modelo y actriz de 23 años asistió a la premiere de Gonzo Girl en el Festival de Cine de Tribeca en Nueva York, apostando por una estética más clásica y nostálgica: un vestido de lunares, ese estampado que nunca pasa de moda y que tanto adoran figuras como Kate Middleton y que evoca con cariño la elegancia de Lady Di.
El vestido de Kaia tenía un escote halter, uno de sus cortes predilectos, y un largo justo a la rodilla que le daba un aire refinado y veraniego. El tono cereza vibrante, combinado con los delicados lunares blancos, aportaba un toque romántico sin dejar de ser moderno. Un look ideal para una tarde cálida en Manhattan, entre proyecciones de cine y flashes de fotógrafos.
Un estilo con historia
El estampado de lunares, también conocido como polka dots, tiene una larga tradición en la moda. Desde los vestidos de flamenca hasta los looks icónicos de la realeza británica, ha sido símbolo de feminidad, alegría y elegancia. Y aunque Kaia Gerber forma parte de una nueva generación de íconos de estilo, su elección demuestra que lo retro bien llevado sigue siendo relevante.
Gerber complementó su outfit con unos mary janes crema, zapatos de tacón bajo que refuerzan ese aire vintage, un bolso negro al hombro, y joyería minimalista que dejaba todo el protagonismo al vestido. Su melena castaña suelta en ondas suaves evocaba el inconfundible estilo de su madre, la supermodelo Cindy Crawford.
Un detalle inesperado
Mientras posaba para las cámaras, se pudo notar un nuevo tatuaje en su brazo derecho, aún cubierto con un vendaje transparente. Aunque no se reveló el diseño exacto, muchos fans especularon que podría ser una frase o símbolo discreto, en línea con el gusto de Kaia por los tatuajes sutiles y significativos.
Los lunares, su estampado favorito
Kaia Gerber no es ajena a este tipo de patrones. En enero de este año, asistió a la fiesta Best Performances de la revista W con un espectacular vestido de Gucci también lleno de lunares. Y en ocasiones anteriores, ha sido fotografiada usando blusas, faldas e incluso trajes de baño con este diseño. Su amor por los polka dots no es casual: representan su predilección por la moda atemporal, con guiños a las décadas pasadas pero adaptada a los gustos contemporáneos.
Mientras el mundo de la moda sigue explorando extremos desde el lujo maximalista hasta la estética normcore, Kaia Gerber demuestra que el clásico vestido de lunares sigue siendo una apuesta segura, sobre todo si se combina con actitud, autenticidad y ese aire relajado que la ha convertido en una de las it girls más influyentes de su generación.
En un universo donde los estilos van y vienen, Kaia confirma que, a veces, menos es más, y que un buen vestido de lunares puede decir mucho sin necesidad de gritar.