Representantes de la FIFA y de la selección de Portugal inspeccionaron los complejos Fairmont Mayakoba y Moon Palace, mientras el Aeropuerto Internacional de Cancún se consolida como punto logístico clave para el Mundial que compartirán México, Estados Unidos y Canadá.
El Caribe Mexicano podría convertirse en uno de los escenarios más importantes en la antesala de la Copa Mundial de la FIFA 2026, evento que por primera vez en la historia será organizado de manera conjunta por México, Estados Unidos y Canadá. Esta semana, representantes de la FIFA y de la selección nacional de Portugal realizaron inspecciones técnicas, logísticas y de seguridad en los complejos Fairmont Mayakoba y Moon Palace, considerados entre las opciones más competitivas para fungir como bases de concentración de las selecciones mundialistas.
La visita marca un hito en la proyección internacional de Quintana Roo, al ser uno de los estados más avanzados en infraestructura turística y conectividad aérea. De acuerdo con fuentes cercanas al proceso, los delegados de la FIFA quedaron impresionados con la calidad, amplitud y estándares de servicio de ambos resorts, que ofrecen lo necesario para recibir a equipos de talla mundial: canchas profesionales, instalaciones deportivas, gimnasios de alto rendimiento, spas, centros médicos, salas de prensa y áreas de recuperación física.
El Moon Palace, propiedad de Grupo Palace, y el Fairmont Mayakoba, operado por la cadena Accor, ya habían sido incluidos en la lista preliminar de sedes potenciales para campamentos base (“base camps”) de selecciones nacionales, por su ubicación estratégica, su oferta integral y la calidad de su infraestructura.
“Nos seleccionaron por todas las capacidades que tenemos: 100 habitaciones, áreas de entrenamiento, restaurantes especializados y espacios dedicados para medios. Estamos listos para recibir a un equipo mundialista”, comentó José Chapur, presidente de Grupo Palace, tras la visita del comité evaluador.
De acuerdo con los lineamientos de la FIFA, las inspecciones tienen como propósito evaluar las condiciones logísticas, de seguridad y de conectividad de cada sitio, así como su capacidad para adaptarse a los protocolos internacionales del torneo. En el caso del Caribe Mexicano, su cercanía con aeropuertos, estadios y centros urbanos, así como su experiencia en eventos internacionales, lo posicionan como una opción de alto nivel operativo.
El Aeropuerto Internacional de Cancún, actualmente en proceso de remodelación y modernización de su Terminal 4, desempeñará un papel clave dentro de la estrategia logística del Mundial 2026. Gracias a su conectividad con más de 120 destinos internacionales y su capacidad para recibir vuelos directos desde las 16 sedes oficiales del torneo, la terminal es considerada una pieza estratégica para la movilidad de selecciones, equipos técnicos y aficionados de todo el mundo.
“El Aeropuerto Internacional de Cancún no solo será una puerta de entrada, sino un nodo logístico esencial para los traslados entre las distintas sedes del Mundial. Su infraestructura moderna y su ubicación geográfica lo convierten en el punto ideal para la operación aérea del evento”, señalaron fuentes cercanas al comité organizador.
El Consejo de Promoción Turística de Quintana Roo (CPTQ) ha mantenido una coordinación estrecha con las autoridades deportivas, hoteleras y aeroportuarias para asegurar que el Caribe Mexicano esté plenamente preparado ante el flujo de visitantes que se espera para el torneo. Según estimaciones preliminares del Gobierno Federal, más de 5.5 millones de turistas internacionales llegarán a México durante la Copa Mundial, y se prevé que al menos el 40% de ellos ingresen por Cancún.
“El Caribe Mexicano no será sede de partidos, pero sí será anfitrión del mundo. Nuestra meta es ofrecer una experiencia única a las selecciones y a los visitantes que elijan esta región como punto de estancia, entrenamiento o descanso durante el Mundial”, declaró el CPTQ en un comunicado oficial.
La infraestructura hotelera del Caribe Mexicano, con más de 128 mil habitaciones distribuidas entre Cancún, Riviera Maya, Tulum, Cozumel e Isla Mujeres, posiciona al estado como uno de los destinos con mayor capacidad para absorber el impacto turístico del evento. Además, los resorts seleccionados cuentan con protocolos de seguridad y sostenibilidad alineados a los estándares de la FIFA, garantizando una estancia segura y de primer nivel.
El Fairmont Mayakoba, reconocido por su diseño ecológico y su integración con la selva tropical, ofrece instalaciones de lujo rodeadas de canales, manglares y playas de arena blanca. Por su parte, el Moon Palace combina espacios de alto rendimiento deportivo con experiencias de hospitalidad premium, lo que lo convierte en un lugar ideal para la preparación de los jugadores antes del torneo.
El posible establecimiento de campamentos base en Quintana Roo no solo representa un logro logístico, sino también un impulso económico y mediático para el estado, que podría atraer una derrama superior a los 100 millones de dólares, derivada del hospedaje, consumo y exposición internacional del destino.
“El Mundial 2026 es una oportunidad única para mostrarle al mundo lo que somos capaces de ofrecer. Desde el CPTQ, seguimos trabajando con visión y compromiso para que el Caribe Mexicano sea sinónimo de hospitalidad, excelencia y orgullo nacional”, subrayó Andrés Martínez Reynoso, director del Consejo.
Además, se espera que la llegada de las delegaciones deportivas impulse la promoción internacional de Quintana Roo como destino premium, fortaleciendo su reputación no solo en el turismo de sol y playa, sino también en el segmento deportivo, de lujo y de bienestar.
Con su combinación de infraestructura moderna, conectividad global y servicios de clase mundial, el Caribe Mexicano se perfila como un aliado estratégico del Mundial 2026, reafirmando su liderazgo turístico y su papel como la puerta de entrada a México y al corazón del turismo internacional.
